Haciendo un rápido recorrido por la historia de los videojuegos, se puede comprobar como un gran número de ellos ofrece una imagen más o menos uniformada y reduccionista de los roles de género: una mujer en papeles pasivos, de víctima o seductora, frente a una figura masculina activa, violenta, dominante y resolutiva.
Un rol corriente de la mujer es aparecer como víctima; por otra parte, en la mitad de casos suelen ser princesas.
Otro rol es el de la belleza; mujeres con grandes senos y reducida cintura.
En conjunto, mientras hay casos en que la figura femenina es vista a través de modelos de rol positivos, en general, la mayoría de los juegos minimizan el papel de la mujer.
Muchos de los juegos descuidan la presencia de personajes femeninos y además, cuando aparecen, lo hacen como dependientes de los hombres.
Son con frecuencia presentadas como objetos sexuales o con un papel menos relevante que los hombres.
Referencia
Urbina Ramírez, Santos (2002, mayo) . El Rol de la Figura Femenina en los Video Juegos. Edutec. Revista Electrónica de Tecnología Educativa. Núm. 15. Obtenido el 10 de mayo de 2008 de http://www.uib.es/depart/gte/edutec-e/revelec15/santos.htm